Los tres vehículos causaron la muerte de al menos siete personas e hirieron a otras 78 en la ciudad norteña de Kirkuk
Las explosiones fueron las últimas de una serie de ataques de los insurgentes contra la policía y los soldados, mientras las tropas norteamericanas se preparan para retirarse a finales de este año.
Kirkuk, habitada por una combinación de kurdos, árabes, turcos, entre otros, se ubica sobre algunas de las mayores reservas de petróleo de Irak y es uno de los territorios disputados como centro de las tensiones entre el gobierno regional de Kurdistán y el gobierno central de Irak en Bagdad.
Una fuente policial dijo que la primera explosión hirió a un policía iraquí, mientras que la segunda afectó a una patrulla policial.
La tercera se produjo fuera de un edificio usado por las fuerzas de seguridad kurdas.
Fuente infobae